Si ya me conoces, sabrás que una de mis especialidades es tratar y curar las lesiones de deportistas profesionales. Han sido muchos los casos a los que me he enfrentado, con todos los niveles de dificultad posibles. Uno de ellos fue el de la pentacampeona mundial de windsurf, Blanca Manchón.
Al ser un deporte que requiere de mucha fuerza en los hombros, es vital tener un buen rendimiento en ellos y controlar que estén bien en todo momento. Pero, también es normal que a veces surjan algunas dificultades por sobreesfuerzo y no se pueda remediar. Pero sí se puede curar con el mejor tratamiento.
Precisamente eso es lo que intenté en el caso de Blanca. Una recuperación rápida para que volviera con más ganas que nunca al deporte que más le motiva. La deportista llegó a consulta en 2012 con una inestabilidad en el hombro izquierdo, que le obligó a retirarse del campeonato mundial de RS:X.
Después de varios estudios personalizados, decidí que la mejor opción era la cirugía. Una operación artroscópica, con una pequeña cámara, reparando los tejidos de la articulación del hombro. Fue todo un éxito.
Su regreso fue arrasador, ya que se proclamó campeona de la IX New Year’s Race-IV Memorial Kim Lythgoe en el Puerto de Santa María. Y no solo eso, sino que también consiguió ser medalla de bronce en la Miami Rolex OCR.
Blanca ya tuvo el enorme placer de representar a nuestro país en windsurf en los juegos olímpicos de Atenas en el año 2004, con tan solo 17 años. Quedó octava, lo que fue un orgullo para aquellos que la vimos lograr el premio más grande desde su inicio. Y no solo esto, sino que se atreverá de nuevo con el reto de los juegos olímpicos de Tokio 2020.
¡A por todas Blanca! Espero seguir viéndote alcanzar éxitos.
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